Lazos rojos, señal de cortesía
relucen ardientes por la ciudad,
insignia flamígera de rebeldía
y de aviso a toda la humanidad.
El sida es una enfermedad cruel
con la que tenemos que batallar
sin saber aún cuál será el papel
que nos permitirá representar.
El hermoso día de la esperanza
celebramos el uno de Diciembre,
para vivir en continua añoranza
y anhelo de curación en confianza.
Ojalá un médico de dicha siembre
de ilusión las voces en su alabanza.
Y así los tristes corazones yermos
Puedan renacer felices, no tiemblen,
Ya que su dueño sea la esperanza.
Maria Oreto Martínez Sanchis