PAZ PARA EL PUEBLO SIRIO
Es la PAZ un aroma de victoria
que alienta el corazón del ser humano...
Es la PAZ el valor que une al hermano
y graba la amistad en la memoria.
Es una PAZ que siempre sabe a gloria,
pues muda el corazón en artesano
que se afana en tender su experta mano
para legar su espíritu a la historia.
Una PAZ que persigue el pueblo sirio,
una nación pletórica de esencia
cuyas raíces arden como un cirio.
Un PUEBLO que suplica la clemencia
que liquide el desolador martirio
en el que está sumida su existencia.
Maria Oreto Martínez Sanchis